Abstract
En el estado Guerrero, la violencia ejercida por las organizaciones criminales se ha superpuesto a la vida cotidiana y política. Este fenómeno ha dado lugar a que se redefinan las relaciones entre el Estado y la sociedad mexicana en la actualidad. Se trata de un nuevo pacto que toma como pivote el control del miedo con la intención de esconder en realidad el verdadero propósito del Estado. Esto consiste en legitimar los ciclos del capital y perpetuar la desigualdad de la sociedad.