A lo largo de los años ha existido especial interés sobre las relaciones entre humanos, por lo que se han creado instrumentos nacionales e internacionales que reconocen los derechos humanos, contrario a ello, poco han interesado las relaciones que tienen los seres humanos con los demás animales, los no humanos, relaciones que sólo han sostenido la tradición antropocéntrica y especista en el que la vida humana está inmersa, sin tomar en cuenta que los humanos, quienes también forman parte del reino animal, no son los únicos seres vivos en el planeta, y por ende no son la única especie con valía e intereses. Por ello es necesario que a los animales no humanos también les sean reconocidos derechos propios, modificando el estatus jurídico en el que han vivido catalogados, creando un nuevo paradigma para que dejen de ser cosificados y, por consiguiente, utilizados. Por lo que, se propone la constitucionalización de sus derechos en México, siendo reconocidos como seres sintientes y consientes, para así dar paso a una legislación que los reconozca como ¿personas no humanas¿. Para el desarrollo del presente, fue aplicada la investigación documental, con enfoque cualitativo, aportando bases a partir de fuentes documentales de gran relevancia.