Los derechos humanos son exigencias elementales y sustantivas que buscan la dignidad humana y el desarrollo de calidad de las personas. Éstos deben de ser satisfechos para cubrir las necesidades básicas e indispensables para el sano desarrollo humano, la finalidad de los derechos humanos es asegurar su integridad y el bienestar individual y colectivo. Por ello, están positivizados en un ordenamiento jurídico, son exigidas por tratados internacionales y por la Constitución; los derechos humanos no deben perseguirlos, sino que el Estado debe otorgarlos por obligación, producto de las exigencias de la sociedad en la historia y se han consolidado en la sociedad. Los derechos humanos deben de ser respetados para que todas las personas sin importar su raza, edad, condición social, religión o cualquier otra condición particular tengan una vida que goce de libertades ciudadanas y derechos sociales y esté libre de violencia. Los derechos humanos se caracterizan por ser derechos interrelacionados, interdependientes e indivisibles1. La importancia es que su cumplimiento nos permite, por la simple razón de ser personas, vivir con dignidad, basándose en el principio del respeto.